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Una faceta de la enconada lucha política que sacudió a Bolivia durante el segundo tercio del siglo XIX fue motivo para la erección de uno de los pocos monumentos conmemorativos que existe en el país.
Cuenta la historia que el día 6 de septiembre de 1850, el Presidente de la República General Isidoro Belzu, cuando paseaba a caballo con su edecán por el prado, hoy parque Bolívar de la ciudad de Sucre, sorpresivamente recibió un atentado de un grupo de sus adversarios políticos. El atentado dejo al General Belzu en estado de gravedad por los balazos recibidos, milagrosamente fue salvado por su escapulario con la Virgen del Carmen, de quien era devoto. Restablecido de sus heridas, el mandatario dispuso la edificación de un templo en el lugar del hecho. Originalmente la iglesia estuvo ubicada al final del Prado, donde actualmente se encuentra la estatua del presidente Aniceto Arce. Posteriormente fue traslada al sitio que actualmente se halla ubicada, al inicio de la avenida Ladislao Cabrera, próxima a la intersección con la avenida Venezuela
El templete de arquitectura circular tiene dos cuerpos. El primero se halla constituido por 28 columnas jónicas con bases y capiteles de piedra labrada, las que reciben un entablamento de friso sencillo coronado por balaustrada. El segundo cuerpo manera de ático tiene ventanas adinteladas y se halla cubierto por una cúpula de media naranja acampanada, rematada en linterna con cupulín. Es admirable la semejanza que existe entre la Rotonda de Sucre y el famoso templete de San Pietro in Montorio proyectado y construido por Bramante en Roma, encargado a realizar por los Reyes Católicos de España.
La silueta de ambos monumentos es similar y solamente varía en el número de columnas, mayor en Sucre. Es muy difícil hallar el origen próximo de la inspiración, en vista de que falta el conocimiento del arquitecto proyectista de la Rotonda.
La Rotonda fue dedicada a la veneración
de la Virgen del Carmen, ha sido honrada como patrona de las
Fuerzas Armadas de Bolivia, ostenta el grado militar de Generala , su
fiesta religiosa se conmemora cada año el 16 de julio, en esa oportunidad se
desarrolla un desfile militar, el Tedeum y posteriormente en las calles y
avenidas aledañas se desarrolla la "fiesta de alcitas" donde se exponen
artesanías en miniatura.